📌 1. Toxicidad del óxido de grafeno (GO) y nanomateriales relacionados
Generalidades: El óxido de grafeno y materiales afines (grafeno reducido, nanotubos de carbono) presentan toxicidad dosis-dependiente, especialmente en estudios in vitro o en animales con altas concentraciones experimentales.
🩸 Hematológica
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GO puede causar hemólisis (ruptura de glóbulos rojos) y alterar la coagulación a altas concentraciones.
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Las propiedades de superficie y tamaño de partícula influyen en la toxicidad.
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No hay evidencia de efectos hematológicos en humanos por exposición ambiental o por vacunas.
🫁 Respiratoria
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Inhalación de GO o nanotubos puede generar inflamación pulmonar, fibrosis o retención en macrófagos alveolares.
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Los nanotubos de carbono presentan riesgo elevado de cáncer pulmonar en animales tras exposición crónica, similar al asbesto.
🧬 Reproductiva y genética
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GO no afecta la viabilidad de esperma humano, pero reduce motilidad a dosis altas.
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En animales gestantes, dosis elevadas de GO reducen peso fetal; los CNT pueden causar malformaciones.
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Estudios muestran daño al ADN celular, especialmente en células pulmonares y endoteliales humanas.
🛡️ Inmunológica
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GO y CNT activan citoquinas proinflamatorias (IL-6, TNF-α), pero sin generar inmunosupresión o autoinmunidad documentada.
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No se ha demostrado que interfieran negativamente con la inmunidad antiviral.
🧠 Sistémica (riñón, hígado, otros)
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GO se acumula en hígado, bazo y riñones tras administración intravenosa en animales.
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Puede causar estrés oxidativo renal y daño hepático, pero solo con dosis muy superiores a las que podrían encontrarse ambientalmente o en productos médicos.
🚫 2. Relación con COVID-19 y vacunas: análisis científico
🔍 Conclusión: NO hay evidencia científica que relacione al óxido de grafeno con el COVID-19 ni con las vacunas.
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Las vacunas contra el SARS-CoV-2 no contienen óxido de grafeno, según listas de ingredientes oficiales y declaraciones de fabricantes (Pfizer, Moderna).
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Las afirmaciones sobre “grafeno oculto” en vacunas han sido refutadas por autoridades sanitarias y carecen de validación científica.
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Estudios actuales investigan el GO como posible antiviral, no como patógeno.
✅ Conclusión general
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El óxido de grafeno presenta riesgos toxicológicos reales en condiciones de exposición artificialmente altas, típicas de laboratorio.
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A niveles ambientales u ocupacionales regulados, y en productos médicos aprobados, el riesgo es extremadamente bajo o nulo.
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No hay evidencia de que el GO esté involucrado en el COVID-19 ni de que se use en vacunas, según datos verificados.
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